A veces no solo el viento se lleva los pesares
también el agua,
el dolor de los recuerdos
y la insípida experiencia de los fracasos…
El corazón no es tan fuerte como el mismo quisiera
como un huracán impetuoso,
así cree ser...
pero los ayeres pueden destrozarlo con un sencillo recuerdo…
Quien lo conoce, sino solo Dios.
Quien con él se complace, sino solo Dios.
Quien con él se complace, sino solo Dios.
Quien nos salva de sus imprecisiones, solo Dios.
Recuerdo que soy frágil, humano e imperfecto.
A veces me tomo un tiempo para disfrutarme.
Como acariciando la frialdad de estas agonías…
Pues no es vano el tiempo vivido ni el olvido pactado.
Solo es mera interrogación
querer mirar otra vez a aquel tiempo
donde fui marchito y olvidado…
Mirar, mientras recuerdo cuanto he soportado y aprendido.
Suspirar, mientras admiro la elocuencia
de las experiencias vividas.
Solo Dios, el que acompaña y no abandona
Me da el valor para erguirme con nuevo brío!!!
08/enero/2016
08/enero/2016