Lecturas:
Romanos 1:28 Salmos 51:12-13 San Mateo 28:17-20
Vemos en todas nuestras comunidades como crecen los movimientos homosexuales, lésbicos, racistas, nacionalistas con matices terroristas y cerramos nuestros ojos.
El problema yace a la par de estos movimientos que están tomando fuerza en nuestro mundo. Los cristianos no debemos ser insensibles al mover del Espíritu Santo, pues donde abundó el pecado sobreabundó la gracia (Rom. 5:20), mas debemos promover a los movimientos que tienen como base a Cristo. Debemos guiarlos y orientarlos. Pero entendiendo que es propósito de Dios y SU Providencia, que ellos existan. Hay que ayudarlos. Si alguien se considera maduro en la fe entonces demuestre esa madurez enseñándoles las Escrituras, no costumbres, sino la verdad de la Biblia. Dejemos que ella obre en la cultura. Recuerde: “Tan solo la Sagrada Escritura es nuestra norma de fe y conducta”.
Eso significa mucho trabajo ya que tendrá que esforzarce más allá de su limitado entendimiento y pedirle el milagro al Señor para que Ud. pueda entender que detrás de las apariencias están almas muy necesitadas, extremadamente dolidas a la espera del bálsamo de la palabra de Dios. Comunicado por fieles devotos al Dios Redentor.
Cristo siempre enfocó en la necesidad de Su creación, los miró, estuvo entre ellos y tuvo compasión. Su compasión no era la típica manifestación de pena, más bien se enfocaba en el individuo y sus necesidades reales.
ÉL a veces satisfacía la necesidad inmediata primeramente y luego las ke le seguían. Unas veces anunciaba las verdades del Reino con sencillez y otras discurría con autoridad divina. Pero todo era siempre guiado por el amor compasivo que ÉL tenía por Su creación.
Aprenderemos que el Espíritu Santo nos guía a entender a las personas y en cierto sentido vivir su dolor pero de ninguna manera nos autoriza a compartir sus pecados ni a solaparlos. Este aspecto necesita mucha oración, lectura y ayuno pues es urgentísimo practicarlo. En fin, no hay excusa. Levantémonos y busquemos encontrarnos con Cristo.
A la luz de las evidencias debemos fomentar la contra parte a todo este sistema corrompido.
Tenemos que reforzarnos en lo que creemos, motivarnos con la Escritura, entusiasmarnos en las misiones, brindarnos amor genuino y apoyarnos a desarrollar ministerios eficases.
Tenemos que estar DISPUESTOS a cargar juntos las consecuencias que dejarán las equivocaciones y las esquirlas de la traición. Eso nos enseñó nuestro Maestro asi que no hay pretexto... hay que continuar peleando hasta la muerte por el Reino de Dios y rescatar las almas perdidas en el reino siniestro.
El lema de una camiseta dice en su parte posterior “Dios y yo mayoría aplastante” espero que nunca se nos olvide.
Romanos 1:28 Salmos 51:12-13 San Mateo 28:17-20
Vemos en todas nuestras comunidades como crecen los movimientos homosexuales, lésbicos, racistas, nacionalistas con matices terroristas y cerramos nuestros ojos.
El problema yace a la par de estos movimientos que están tomando fuerza en nuestro mundo. Los cristianos no debemos ser insensibles al mover del Espíritu Santo, pues donde abundó el pecado sobreabundó la gracia (Rom. 5:20), mas debemos promover a los movimientos que tienen como base a Cristo. Debemos guiarlos y orientarlos. Pero entendiendo que es propósito de Dios y SU Providencia, que ellos existan. Hay que ayudarlos. Si alguien se considera maduro en la fe entonces demuestre esa madurez enseñándoles las Escrituras, no costumbres, sino la verdad de la Biblia. Dejemos que ella obre en la cultura. Recuerde: “Tan solo la Sagrada Escritura es nuestra norma de fe y conducta”.
Eso significa mucho trabajo ya que tendrá que esforzarce más allá de su limitado entendimiento y pedirle el milagro al Señor para que Ud. pueda entender que detrás de las apariencias están almas muy necesitadas, extremadamente dolidas a la espera del bálsamo de la palabra de Dios. Comunicado por fieles devotos al Dios Redentor.
Cristo siempre enfocó en la necesidad de Su creación, los miró, estuvo entre ellos y tuvo compasión. Su compasión no era la típica manifestación de pena, más bien se enfocaba en el individuo y sus necesidades reales.
ÉL a veces satisfacía la necesidad inmediata primeramente y luego las ke le seguían. Unas veces anunciaba las verdades del Reino con sencillez y otras discurría con autoridad divina. Pero todo era siempre guiado por el amor compasivo que ÉL tenía por Su creación.
Aprenderemos que el Espíritu Santo nos guía a entender a las personas y en cierto sentido vivir su dolor pero de ninguna manera nos autoriza a compartir sus pecados ni a solaparlos. Este aspecto necesita mucha oración, lectura y ayuno pues es urgentísimo practicarlo. En fin, no hay excusa. Levantémonos y busquemos encontrarnos con Cristo.
A la luz de las evidencias debemos fomentar la contra parte a todo este sistema corrompido.
Tenemos que reforzarnos en lo que creemos, motivarnos con la Escritura, entusiasmarnos en las misiones, brindarnos amor genuino y apoyarnos a desarrollar ministerios eficases.
Tenemos que estar DISPUESTOS a cargar juntos las consecuencias que dejarán las equivocaciones y las esquirlas de la traición. Eso nos enseñó nuestro Maestro asi que no hay pretexto... hay que continuar peleando hasta la muerte por el Reino de Dios y rescatar las almas perdidas en el reino siniestro.
El lema de una camiseta dice en su parte posterior “Dios y yo mayoría aplastante” espero que nunca se nos olvide.
Por: Freddy Pereira López
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