Si alguien está unido a Cristo,
hay una nueva creación.
Lo viejo ha desaparecido y todo queda renovado.
2 Corintios 5:17
I.-NUESTRA POSICIÓN EN CRISTO.
Antes
vivías sin “dios y sin ley”. Osea no te interesaba quien es Dios ni menos pensabas
en El seriamente. Ahora empezaste a seguirlo de cerca, osea te convertiste a
Él. Dios hizo un milagro y este consiste en que te des cuenta que lo necesitas,
que literalmente sientes que tus ojos se abrieron y puedes verlo.
Aunque
no entiendas que está pasando en este mismo instante, lo harás de a poco no te
preocupes.
Dios
ha empezado a mostrarse a ti, a revelarse. Por decirlo de una manera, ya no
está escondido, ahora puedes ver y sentir lo que estaba haciendo por ti desde
hace muchos años, aun antes de que nacieras. Para que asi, llegara este
momento. Este instante Dios lo ha permitido para que estés consciente que El está vivo y te ama a full.
Vas a
empezar a descubrir el significado de muchas cosas y algunas de las respuestas
que te venias haciendo desde niño.
En este momento tú te acabas de dar cuenta que aceptaste vivir para El. Recibiendo
a Jesús como salvador, de una forma muy personal e íntima. Este es el instante
en que tu vida empieza a ser transformada. Esta transformación va a continuar
poco a poco. Ahora estas autorizado desde el cielo para disfrutar la compañía
de Jesús y ya nada será igual, solo mejor.
Nuestra
posición en Cristo habla acerca de un antes y un después. Esto significa que antes
no le prestabas atención y ahora sí. Antes andabas lejos de Dios, desde ahora
estas en Cristo. Empezando a descubrir quién eres en realidad y que es lo que
te pertenece como hijo de Dios.
Desde
ahora en adelante Dios quiere que tengas muy claro quién eres. Una nueva
persona.
Recuerda: “Dios es mi Padre y me creó con un propósito; voy hacia una meta. Mi
encuentro con El apenas es el comienzo; Mi Padre tiene algo mucho más grande
preparado para mí”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario